LA MEJOR MEDICINA
6 de abril de 2001
Bien, ahora. Nuestra representante en la Tierra nos ha pedido que les demos alguna información con respecto a las experiencias que cada uno de ustedes está teniendo a medida que la limpieza procede y están siendo levantados libres de las amarras de esa vida que han estado experimentando mientras han estado bajo la ilusión de ser seres físicos, caminando por ahí sobre la superficie del planeta, igual que todos los demás que ven a su alrededor. Y sin embargo, nunca te has SENTIDO como todos los demás a tu alrededor, ¿verdad? Siempre te has sentido un poco diferente, aunque por aquí y por allá te encontraste con alguno que era como tú, solo para que este desapareciera de tu vida tan misteriosamente como había llegado.
Nosotros estamos aquí para decirte hoy que tú NO eres solo un cuerpo físico y que sí eres diferente en algunas maneras muy significativas a todos los demás a tu alrededor — o al menos de la mayoría de los que están a tu alrededor, porque ahora algunos de ustedes están asociados con otros con quienes comparten esta herencia común.
“¿Qué herencia?” podrías preguntarte. Ahhh. Ahora nos toca revelarte uno de nuestros “secretos”. Verás, tú eres uno de nosotros. Tú eres uno de los que se juntaron en el principio para formar una alianza a partir de la cual este mundo sobre el cual ahora caminas fue creado. Tú has sentido esta relación especial con este planeta porque ella es en realidad para ti como un niño para un padre. Ella es tu creación y la amas con todo tu ser y te duele ver lo que se le está haciendo, especialmente ahora, mientras los últimos días de avaricia e interés propio buscan tomar hasta el último pedacito que se pueda tomar antes de que todo haya desaparecido.
Querido (a), tú eres uno de nosotros. Hablas de la Tierra como tu madre, pero en realidad, TÚ eres el padre, y tienes una responsabilidad hacia tu creación — el verla a través de su nacimiento hacia la siguiente plataforma de su existencia, en la larga espiral ascendente hacia la Fuente.
Cuando ella esté ya de manera segura establecida en su nueva realidad y los nuevos administradores para su jornada hayan “llegado” y asumido las riendas, todos estaremos completos en nuestro arreglo y pasaremos a otros esfuerzos creativos en los vastos campos de posibilidades que están disponibles. Terminaremos nuestra alianza como co-creadores de ESTA realidad y seguiremos adelante para formar otras alianzas para otros propósitos y para satisfacer otros deseos en la búsqueda de experiencias en representación del Creador de todos nosotros.
Ahora, entonces, ¿Cómo se relaciona todo esto con lo que estás experimentando ahora? ¿Cómo se relaciona con los sentimientos que estás teniendo y los cambios corporales que estás experimentando? Bueno, les pedimos que nos permitan contarles un pequeño cuento, un tipo de metáfora para entender exactamente lo que está sucediendo.
Tú no eres el cuerpo que ocupas. Eres un vasto campo de energía inteligente que se ha proyectado a sí mismo descendiendo a través de lo que tú llamas “dimensiones” (ese no es un término preciso, pero es lo que tú entiendes, así que es lo que usaremos por ahora) y vertió todo eso en un contenedor muy pequeño, del tamaño de un dedal tratando de contener un océano. Incluso hay un cuento infantil llamado “Pulgarcito”, que trata de abordar la experiencia de ser tan pequeño en un mundo muy vasto y enorme.
Déjanos contarte entonces la historia de Dedalita, el diminuto contenedor que eres tú y el océano de consciencia que estás tratando de navegar desde la perspectiva de un dedal flotando en el mar en un vasto océano de experiencia.
Dedalita es el nombre que te daremos como personaje central de nuestra historia. Haremos que Dedalita sea femenina, pero eso es solo para compensar todas las historias que tienen personajes centrales masculinos. Recuerda que esto es una parábola y que el significado solo se entiende intuitivamente y no se debe tomar literalmente. Comencemos pues nuestra historia:

Un día, Dedalita se despertó. Ella había estado durmiendo mucho tiempo, arrullada por el movimiento eterno de las olas sobre las que flotaba, un minúsculo objeto flotando en el vasto océano, lejos de cualquier costa o signo de tierra. En su sueño, ella no era consciente de nada más que de sus sueños, pero ahora que se había despertado, estuvo consciente de ser tan pequeña y de estar tan lejos de todo lo que no fuera la vasta extensión del océano que veía a su alrededor. Ella no tenía ningún medio de navegación y se sintió perdida y desvalida mientras percibía su situación. “¿Dónde están los otros dedales?” se preguntó. “Seguramente no puedo ser la única como yo. ¿Cómo puedo encontrar a los otros?, ¿estoy destinada a solo flotar en este océano?, ¿no hay nada más?”
Dedalita estaba angustiada. Había estado tan contenta en sus sueños en los cuales vivía una vida plena, rodeada de muchos como ella y siendo capaz de ser justo quien era y tener a todos y a todo lo que le rodeaba ser justo lo que eran. Todo había sido tan armonioso, pero ahora, ¿qué iba a hacer? Ahora parecía estar completamente sola. ¿Dónde estaban los otros sobre quienes había soñado y cómo podría encontrar el camino de regreso a ese mundo de sus sueños? ¿Cómo había llegado a estar aquí, sola en este vasto océano, sin nadie con quien hablar, nadie con quien poder compartir el mundo de sus sueños?
Dedalita estaba ahora muy infeliz, pero también estaba determinada a encontrar la salida de la situación en la que se encontraba. Estaba determinada a encontrar a los otros y a encontrar su camino de regreso al mundo de sus sueños. ¿Pero cómo podría hacerlo? ¿Cómo podía navegar este vasto mar y adónde iría? Ciertamente no había señal de tierra alguna en ninguna dirección ni medios para alcanzarla, incluso si hubiera podido verla. Así que Dedalita oró. Era consciente de sí misma y sabía que debía haber un Hacedor-de-Dedales en alguna parte, o ella no habría existido en lo absoluto. “Gran Hacedor-de-Dedales, por favor ayúdame. Estoy sola y perdida en este vasto mar y quiero volver al mundo de mis sueños. Por favor envíame los medios para llegar allí”.

Así que Dedalita elevó su plegaria y el Gran Hacedor-de-Dedales la escuchó y envió una hermosa ave blanca a recogerla y llevarla al mundo de sus sueños, el cual yacía más allá de su capacidad de ver desde donde ella estaba. Entonces Dedalita fue reunida con aquellos de su especie y vivió feliz para siempre, despierta y consciente y rodeada de toda la belleza que ella amaba.
Así que, mis queridos, Yo he escuchado su llamado y enviaré a mis hermosas aves blancas a recogerles y llevarles al mundo de sus sueños, donde podrán vivir felices por siempre, despiertos y conscientes y rodeados de la belleza que ustedes aman.
Les hablo ahora en el singular porque Yo soy el único aquí. Yo soy el Hacedor-de-Dedales Y el Dedal. Yo soy las Huestes del Cielo y ustedes también lo son. Esta idea de que haya algo más es algo que yo inventé y me ha servido bien, ya que de otra manera ¿Qué más había para Mi por hacer? He estado pretendiendo que soy diferentes partes, interactuando con otras partes, pero ahora es el momento en que Dedalita despierte a su conexión con el Hacedor-de-Dedales, por lo que es necesario que ella deseche todas las partes de sí misma que no estén de acuerdo con esa verdad: ella y el Hacedor-de-Dedales son uno.
¿Les suena familiar? Alguien más dijo algo así hace aproximadamente unos 2000 años y no fue entendido entonces por muchos. Solo aquellos que tenían la misma experiencia de unidad que él tenía podían entender lo que realmente quiso decir cuando lo dijo y no había muchos de ellos alrededor en ese momento. De hecho, no hay muchos de ellos alrededor en este momento, pero eso está a punto de cambiar. Por cierto, si por casualidad escuchan de alguno que dice que ya ha ascendido, no lo crean. Aunque hay algunos individuos que han alcanzado la experiencia directa de la unidad, ellos no hacen tales declaraciones. Confían en las percepciones de aquellos a su alrededor para discernir su verdadero estado. Se puede sentir.
Hay embusteros en medio de ustedes que usan palabras para decir algunas cosas muy intrigantes, pero ustedes no pueden SENTIR su conexión con la Fuente de la manera que pueden con aquellos que realmente están en ese estado. Confíen en lo que SIENTEN. Sus sensaciones son un mejor indicador de la verdad que sus mentes, que pueden ser conducidas en muchas direcciones, siguiendo tal o cual teoría, pero que están desconectadas de la EXPERIENCIA directa de la verdad.
Comenzamos nuestra discusión hoy con la declaración de que nos referiríamos a las experiencias que están teniendo a medida que procede la limpieza. Les contamos nuestra pequeña historia para dar a estos próximos comentarios un contexto apropiado. Por favor, tengan paciencia con nosotros si el día de hoy somos inusualmente detallistas, ya que esto no es algo fácil de transmitir.
Cada uno de ustedes ha sido como Dedalita, sintiéndose perdido y solo en el vasto mundo a su alrededor y queriendo regresar al mundo de sus sueños sin saber cómo llegar ahí. Eventualmente, comenzaron a acercarse al Gran Hacedor-de-Dedales y a pedir Su ayuda. Su petición ha sido escuchada y ahora están siendo levantados — no por una hermosa ave blanca (aunque ese sea un símbolo común para el Espíritu), sino por un cambio vibracional.

Imagínate por un momento a un gran buque marítimo. Ha estado navegando el océano durante mucho tiempo y su casco está cubierto de algas, percebes y fango. Ahora el buque ha sido llevado al dique seco y todas las cosas que están pegadas a su casco están siendo limpiadas, en preparación para otro viaje en otro mar. Esto es lo que te está pasando.
Todas las cosas que se te han adherido están siendo limpiadas. Tú estás descartando las cargas emocionales que se han ido acumulando a lo largo de todo el curso de tu viaje encarnado a través de la historia de este planeta, así que estás volviendo a experimentar muchas emociones que han estado dormidas en tu memoria celular y que ahora están aflorando a la superficie.
Te están siendo quitados los percebes de los ojos y empiezas a ver con más claridad. Estás experimentando finalizaciones con aquellos con los que has viajado, para que estés totalmente libre de todos los apegos que te impedirían ser tu ser esencial. Todavía no estás consciente de exactamente qué tanto esos apegos te han atado a esta Tierra, pero a medida que salgan de tu vida y comiences a estar libre de ellos, te darás cuenta del sutil agarre que tenían sobre ti y cómo te limitaron en la expresión de tu verdadera esencia.
Todas estas cosas ahora están yéndose de ti y de tu vida, incluyendo las IDEAS que tenías acerca de lo que era verdad y de cómo se ve tu “naturaleza verdadera”. Probablemente te estás sintiendo MENOS tolerante de lo que ves a tu alrededor, a pesar de tus “imágenes” de cómo se supone que debe de ser un “trabajador de la luz”. Estás creciendo en tu habilidad para perdonar y para tener compasión, al mismo tiempo te sientes más moralista y crítico de los abusos de poder que ves a tu alrededor, pero recuerda que aquellos en el poder llegaron ahí a través del consentimiento colectivo de todos los que contribuyeron a que ahí estén.
Ahora que la puerta se ha cerrado a las posibilidades y el curso ha sido definido, muchos se están despertando a la dolorosa realización de que hay consecuencias para todas las acciones — tanto para las que hacen cosas como para las que no las hacen. Aquellos que se sentaron a mirar, contentos de dejar que otros pensaran por ellos, están teniendo un desagradable despertar a las consecuencias de esa acción. La INACCIÓN es también una acción. El proceso entero que se está desarrollando ahora en el planeta expondrá el envés de la “nave del estado”, por así decirlo y las “criaturas” que han estado escondidas en ese envés serán vistas más y más abiertamente a medida que los días procedan hacia la conclusión.
Todo esto es parte del proceso del planeta completando con este nivel de su ser y debido a que ella es como tu propia hija, sientes enojo, rabia y quizás impotencia por lo que ves que está sucediendo. Aquellos de ustedes a quienes no les gusta sentirse impotentes están sintiendo desesperación o determinación por HACER ALGO, dependiendo del grado de impotencia o empoderamiento que hayan logrado, pero todo se reduce a lo mismo.

Esta profanación final se LLEVARÁ A CABO y tiene como propósito la experiencia de la propia profanación y el sufrimiento que resultará de ella. Es fácil culpar al Creador y enfadarse acerca del sufrimiento, pero ¿de qué otra manera podría la “lección” ser enseñada? La gran masa de gente no aprendería la “lección” por medios menos dramáticos. Preferirían permanecer dormidos y dejar que alguien más piense por ellos, así que necesitan un “rudo despertar”, no muy diferente a Dedalita en nuestra historia.
El propósito del despertar es poner el propio corazón y la propia mente hacia la búsqueda en la dirección correcta — hacia el Gran Hacedor-de-Dedales — por las soluciones. La causa de todo lo que ustedes ven que está “mal” en la manera en que la gente se conduce en el planeta — incluyendo su comportamiento reproductivo — es una falta de conexión con la Fuente. Para hacer una conexión con la Fuente, uno debe primero percibir la necesidad de esa conexión. Mientras las propias necesidades materiales sean el objetivo primario, uno no estará muy inclinado a buscar una Fuente superior. Así que los fundamentos materiales serán despojados de los muchos y puestos en las manos de los pocos y el sufrimiento de los muchos se incrementará. De hecho, eso ya está bastante bien encaminado en el proceso.
Ustedes que están leyendo esto son los pioneros. Ustedes han comenzado su despertar un poco antes que el resto. Ustedes han comenzado a dirigirse hacia la Fuente un poco antes que la gran masa de la humanidad y regresarán para guiar a sitio seguro a aquellos que habrán necesitado de sus lecciones en lo que está por venir para este planeta y todo lo que está sobre ella.
Los animales, plantas y otros “inocentes” en este drama continuarán viviendo en otros planetas y ustedes sufren cuando ven su sufrimiento debido a su gran amor por este planeta y todas sus formas de vida — incluyendo las rocas, los ríos, los cielos, el aire y las plantas y animales que han sido tan impactados por las acciones humanas.
Ustedes van a regresar a la tierra de sus sueños y están siendo limpiados de todo lo que los mantendría atados a este plano y nivel de la realidad. Están actuando como pararrayos para aterrizar la Luz superior en la estructura atómica del planeta y sus cuerpos están pasando por muchos cambios como resultado de esta función que ustedes realizan, los cuales no todos son agradables y algunos pueden ser bastante atemorizantes porque no se sienten en control.

La mejor “medicina” que podemos prescribir para todos los “males” en estos cambios es aumentar tu profundidad de ENTREGA. Entrégale todas estas cosas a Dios (como sea que Lo concibas) y profundiza tu conexión con la Fuente. Profundiza tu confianza en el viaje y entrega toda resistencia a lo que ves que sucede a tu alrededor y dentro de ti. Entrega también tus miedos.
Cuando no te sientes en control, el miedo se eleva en tu consciencia. Deja que el miedo venga, y luego siéntate con él. Deja que se filtre a través de ti y se vaya y obsérvalo. Observa que el miedo puede estar dentro de ti y que tú no eres obliterado por él. Observa como tú no tienes que ser controlado por tu miedo. Si te sientes “perdiendo el control” y te quedas paralizado por tu miedo, recuerda tu conexión con la Fuente y úsala como la cosa a la que te aferres, en lugar de tu apego a un resultado en particular. Todos tus miedos, todo tu sufrimiento y dolor tienen alguna medida de apego a un resultado o curso particular de acontecimientos. Todo es una forma de resistencia al movimiento de la vida, especialmente ahora, en estos tiempos acelerados.

Lo hemos dicho antes y lo diremos de nuevo — “Deja ir y deja que Dios se encargue de los detalles”. Tú estás deshaciéndote de todos los escombros que has adquirido durante tus muchas vidas en la faz de este planeta. No es cómodo a veces, pero recuerda que estás perdiendo solo aquello que no es parte de tu ser esencial. Tú estás siendo limpiado de todos los percebes y fango que has tomado en tu viaje a través de este océano y serás elevado a un “dique seco” para completar el proceso. Entonces estarás limpio y brillante y nuevo y te embarcarás en otros viajes en otros mares, porque esta Tierra y este mar habrán pasado y ya no estarán allí nunca más.
Amén, Adonoy Sabayoth. Somos las Huestes del Cielo. Te amamos. Estamos contigo. Tú eres uno DE nosotros y tú eres uno CON nosotros y estás despertando a esa verdad ahora. Te dejamos ahora, en paz y honor y bendición. Te hablaremos de nuevo.